APRENDIENDO A EDUCAR A LOS HIJOS

Los que son papas y los que algún día seremos debemos aprender de muchas cosas de la vida para educar a los hijos. Hay ocasiones en que nosotros nos enteramos de una infinidad de problemas familiares , de los cuales muchas veces queremos ayudar pero no podemos , lo único que nos queda es aprender de esos errores que otras personas tienen y si es posible ayudémosla (lo).

Recordemos también que nadie es perfecto, por consiguiente debemos saber perdonar y aceptar los errores de todos.

He aquí lo siguiente:

Quiero compartirles esta historia que escuche de un humilde payaso urbano (lo que suben a los camiones) quien lo declamo, y decidí compartirlo con ustedes:

   Este era un joven quien fue sentenciado a muerte, la razón... no viene al caso, ese no es el hecho, el iba a morir, cuentan que cuando faltaba poco para su ejecución el carcelero le grito con ese tono prepotente y despectivo:

"¡Hey tú asqueroso asesino, tienes visita, disfruta estos 5 minutos que tiene derecho que ni te merecías!"

El joven salió, extrañado, cual no sería su sorpresa... ¡He ahí su padre!

El rápido corrió y con llanto en los ojos le dijo:

"Gracias Padre, por a ver venido a verme morir, carne de tu carne, sangre de tu sangre, siento a verte hecho sufrir en esta terrible situación...", y bajando los ojos murmuro, "no te afligiré más papá se que eres orgulloso y no lloraras".

   Terminado de decir esto el padre que no dejo de mirarlo con ojos fríos le dijo "¡¡Que bah!!, menuda vergüenza ya me has echo pasar, solo vine para verte morir como lo que eres un maldito y vulgar criminal, ya que TÚ no eres mi hijo ya que entre tú y YO hay una gran diferencia, tú un vil asesino de una inocente muchacha mientras que yo, YO soy un hombre respetable de grandes y poderosos negocios sin nada que avergonzarme... de ti me olvidare cruzando la puerta de entrada".

Al escuchar esto el joven lleno de coraje le grito "Como te puedes avergonzarte de mí, si lo único que hice fue seguir tus consejos y EJEMPLOS, Sabes... Sabes cuantas veces de niño me besaste o al menos me abrazaste... bien, te lo diré... ¡¡NUNCA!!... al contrario siempre me gritabas y golpeabas diciendo que de ese modo se forjan los grandes hombres de carácter, que podrán controlar tu gran imperio comercial... de adolescente, cuando todavía estudiaba... lo recuerdo... llegue a tener amigos, verdaderos amigos a los que amaba y me amaban, y que hubieran dado su vida por mí... pero Tú los alejaste de mí y me obligaste a evitarlos todo porque no tenían dinero, ni eran de tu sociedad, ni te podían ser útiles... así que tu me presentaste a nuevos amigos, y esos sí, sí tenían dinero y no les importaba más... esos amigos son los que morirán hoy conmigo, ellos por prepotente y yo por ignorante... nunca supe el significado de muchas cosas, siempre que te preguntaba era lo mismo... mañana... ahora no tengo tiempo te responderé mañana...  pero ahora es tarde ese mañana es hoy, el día en que voy a morir, y si bien tu dices que te olvidaras de mi al cruzar esa puerta, bien pudiera ser cierto pero si no tu sufrirás en una cárcel peor que la mía llamada conciencia, de ella nunca podrás escapar ya que sabrás que todo esto es culpa tuya, y que lo pudiste evitar, no vemos papá..."

Mientras oía esto el padre no podía hacer menos que morderse los labios
para contener el llanto, para luego con paso tambaleante y tembloroso
dirigirse a la puerta que los sacaría de la cárcel de piedra ... mas nunca, de la cárcel llamada CONCIENCIA .
 

Dios nos ama infinitamente, por eso seamos sensatos al realizar algo en nuestra vida, no esperemos hasta que sea demasiado tarde.

Pastoral Juvenil